Farewell from Maureen

What a Parish CAN be like

Discovering what a parish CAN be like has been one of the greatest gifts from my 18 years at St. Matthew’s. What I found when I arrived was a community that welcomed, made room for people, and reached into the downtown community. Part of its character flows from being a city parish, but the tenor and example start at the top.

When it comes to pastoral care, I have not seen anyone try as hard as Msgr. Jameson to say yes to those coming to him for help.

Strengthening our Ties

So many of my best memories come from working with our generous volunteers—organizing hospitality ministers for holy days, working with Cathedral tour guides, and stuffing mailings with rectory volunteers. As my focus has shifted and fellow staffers have taken over coordinating these groups and ministries, I have missed the people and the conversations.

Building up our parish communications has been gratifying and well worth the effort. Launching our new website on the 2022 Feast of Our Lady of Guadalupe was especially rewarding. Writing our Weekly Updates, promoting the work and ministries of my fellow staff members, and connecting with you on social media are a step away from face-to-face but have a wider reach and, I hope, have strengthened the ties among us.

The Right Time

Almost 10 years ago I was blessed to begin spending time each week with my first grandbaby, Ellie, while continuing my work here. Then came Rowan, Koa, Evie, Maisie, and another granddaughter arriving this September. I’m so happy knowing I'll now have more time with my husband, children and grandchildren.   

With the changes in lay staff and priests here at St. Matthew’s, you can sense new purpose. I feel the same in my family and trust that now is the right time 'under heaven' for both.

Thank You

Thank you to our dedicated and generous lay staff and priests, to our parishioners, volunteers and friends, and to Msgr. I pray for a blessed year ahead for you and ask for your prayers for me and my family. You're in my heart to stay.

Gratefully yours in Christ,
Maureen

Cómo PUEDE ser una parroquia

Descubrir cómo puede ser una parroquia ha sido uno de los mayores regalos de mis 18 años en San Mateo. Lo que encontré cuando llegué aquí fue una comunidad que daba la bienvenida, hacía espacio para la gente y llegaba a la comunidad de la ciudad. Parte de su carácter emana de ser una parroquia de la ciudad, pero el tenor y el ejemplo comienzan desde arriba.

Cuando se trata de atención pastoral, no he visto a nadie esforzarse tanto como Mons. Jameson para decir que sí a quienes acuden a él en busca de ayuda.

Fortaleciendo nuestros lazos

Muchos de mis mejores recuerdos provienen de trabajar con nuestros generosos voluntarios, organizar a los ministros de hospitalidad para los días santos, trabajar con los guías turísticos de la Catedral y llenar los sobres para el correo con los voluntarios de la rectoría. A medida que mi enfoque ha cambiado y mis compañeros de trabajo se han hecho cargo de la coordinación de estos grupos, he echado de menos a las personas y las ocasiones de conversacións.

Desarrolar las comunicaciones de nuestra parroquia ha sido gratificante y ha valido la pena el esfuerzo. El lanzamiento de nuestro nuevo sitio web en la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe 2022 fue especialmente gratificante. Escribir nuestras actualizaciones semanales, promover los ministerios de mis compañeros de trabajo, y conectarme con ustedes en las redes sociales están a un paso del cara a cara, pero tienen un alcance más amplio y, espero, hayan fortalecido los lazos entre nosotros.

El momento adecuado

Hace casi 10 años tuve la bendición de comenzar a pasar tiempo cada semana con mi primera nieta, Ellie, mientras continuaba mi trabajo aquí. Luego llegaron Rowan, Koa, Evie, Maisie y otra nieta que llegó en septiembre. Estoy muy feliz de saber que ahora tendré más tiempo con mi esposo, mis hijos y mis nietos.

Con los cambios en el personal laico y los sacerdotes aquí en San Mateo, se puede sentir un nuevo propósito. Siento lo mismo en mi familia y confío en que ahora es el momento adecuado 'bajo el cielo' para ambos.

Gracias

Gracias a nuestro dedicado y generoso personal laico y sacerdotes, a nuestros feligreses, voluntarios y amigos, y a Mons. Rezo por un año bendecido por venir para ustedes y les pido sus oraciones por mí y mi familia. Estás en mi corazón para quedarte.

Agradecidamente tuya en Cristo,
Maureen